lunes, 2 de marzo de 2015

Sus ojos hacían sentir en su cuerpo una sensación de placer insuficiente, pues ella no lo amaba como antes, sólo esperaba que el fuego que alguna vez existió culminara- como se apagaba la vida en un instante efímero, insensato, escalofriante dolor que el alma no quiere sentir.
Su voz quebrantada por un llanto interno no dejaba ver la única escapatoria a tanto mal.
¿Por qué no lo dices querida niña?
Que sin él los días son sólo tristes cuadros, como si Picasso no sintiera pasión al tocar sus pinceles de finos trazos que ha tantas mujeres hacia suspirar-
¿A caso se te fue el amor?  ¿A caso la vida te enseño  a que hasta los ángeles más bellos sienten dolor?
¿Por qué nos da miedo sentir dolor?
No lo sueltes, no lo ates, sólo déjalo vivir.

¡Cobarde! maldito cobarde que estás ahí te invito a salir... ya no eres nada para mí.

domingo, 1 de marzo de 2015

¿Machismo o igualdad?

Investigando sobre las publicidades y propagandas para un final de Historia que tengo que rendir en estos días, encontré en Google (el buscador más viral que existe hoy en la Internet) publicidades de los 40. Algunas trataban sobre guerras (bolchevismo, segunda guerra mundial, Stalin, Hitler, Mussolini) y otras, que fueron las que me llamaron demasiado la atención, eran publicidades de determinados productos, resultado del auge del capitalismo en esos momentos, en el que colocaban a las mujeres como modelos de publicidad.
Claro que era modelos de lavarropas, aspiradoras, elementos de cocina, en sí todos artefactos de limpieza. En un cartel de esas publicidades se puede leer “una buena esposa siempre sabe cuál es su lugar” y al lado una mujer con una aspiradora. En la segunda imagen podemos ver que está en Ingles “Show her it’s a man’s World” que en español quiere decir “Muéstrele que es un mundo de hombres"
 
Entonces ante esta situación, me produjo gran curiosidad preguntarme ¿Qué papel cumplía la mujer en ese entonces? ¿Qué querían expresar los hombres en ese mundo en el que la mujer caminaba por detrás de ellos?
Es obvio el hecho de que ya no seguimos en la década del ’40 y la vida es distinta tanto en lo material como en lo ético y moral. Hoy en día la mujer en sí ganó muchísimo lugar en la sociedad y demostró que puede trabajar y luchar como el hombre, que es independiente, que tiene derechos, que trabaja y a la vez es madre, esposa, amiga, y un montón de cosas más. Pero más allá de lo que se ve a simple vista, nunca se preguntaron si en esa búsqueda de “igualdad social” ¿la mujer perdió respeto a la vez que ganó derechos? Esto es una pregunta muy compleja que yo misma no me podía contestar.
Por ende, le pregunte a mi pareja de lo que opinaba, el me dio su punto de vista: “la mujer aunque vivía para el hogar, era más respetada en la sociedad como tal, y los hombres eran más caballeros, cosa que hoy en día esa caballerosidad se perdió en la mayoría de los ciudadanos”.
No me considero una ferviente feminista, pero sin embargo, muchas preguntas empezaron a surgir en mi cabeza. Por un lado, hoy en día la mujer sufre constantes maltratos, violencia domestica, prostitución, trata de blanca y muertes. Como tantos casos que hoy siguen impunes.
La respuesta de mi pareja, no dejo mis cuestionamientos totalmente claros. Por lo que decidí escuchar, o mejor dicho leer, lo que opinaban las personas en general, ya sean hombres o mujeres de distintas edad, y obviamente, con distintos pensamientos. Entonces, paso siguiente, abrí mi cuenta de Facebook, para dar inicio a un debate.

 Es impresionante como con un clic y un enter  podes resolver tus dudas. Subí las fotos plantee mis preguntas al público cibernético y en menos de una hora aproximadamente tenía mi primer invitado en cuestión, que esbozaba su planteamiento del debido tema.
“Hay un lugar para cada cosa, nada está bien en esto, hoy en día muchas mujeres que buscaban igualdad, está es engañosa, donde la mayoría sólo busca igualdad de derechos, mientras la beneficien a ella. Hay un extremo para todo, y pienso que hoy en día se revirtieron los papeles, el punto y medio existe, pero somos humanos y nuestra naturaleza es ambiciosa, todos, todo el tiempo cuando se ven beneficiados quieren más, por esto todo está re “cagado”. No defiendo a nadie, porque ambos están mal”
Hasta el momento sólo me encontraba con este comentario, el cual tiene algo fundamental para resaltar, y que es nuestra fiel amiga “la ambición”. El humano es totalmente ambicioso, quizás algunos lo tienen en mayor grado y otros no tanto. Pero la ambición se encuentra en todos nosotros, y es algo de lo que nunca podremos escapar. Si no existiría este factor, creo que la historia tampoco se hubiera creado. Estamos atados a nuestras ambiciones, y sea cual fuere el sexo que seamos, siempre va a haber cierta ambición que nos llevará a preguntarnos, que puedo sacar de ello para mi bien.
Pensé que este comentario sería el único que tendría mi debate, y era una total  pena. Porque mis dudas seguían estando a flor de píe. Decidí entonces, dejar el celular a un costado y seguir con mi rutina de preparar el final que tan agobiada me tenía (la seguiré teniendo hasta que apruebe la cátedra).
Pasada varias horas, decidí fijarme para ver si mi suerte cambiaría y habría más comentarios en mi Facebook. Y resulta que sí, había otros comentarios, pero sólo de hombres, mientras que algunas mujeres sólo se habían jactado de poner “like” en las fotos y no comentar. No lo voy a negar, eso me preocupó bastante. Estos fueron los comentarios que me llegaron, y los que estuvieron más certeros al tema principal del debate:
“¿Por eso se perdió la caballerosidad? No creo eso, se que se perdió porque dejaron de enseñarlo y son otras épocas donde ni se exige disciplina, lo cual para mí está mal, como se van a formar hombres o caballeros si no se les exige y no se les impone el respeto hacia los demás, donde tanto el hombre como la mujer se han llegado a degradar y llegar a tan bajo nivel a veces que el respeto se pierde por muchas razones que difieren de la pelea de la mujer por sus derechos. También se pierde el respeto de igual manera por un hombre cuando no trabaja.
Abajo, otro comentario también de un hombre decía:
“Creo que la mujer en su afán de ponerse en el mismo lugar que el hombre, está perdiendo su lugar. No digo que no deba tener los mismos derechos, sino que simplemente cada uno tiene que ocupar un rol y no interponerse en lugar del otro. También creo que juegan con el feminismo a su favor. Por ejemplo: dicen todo el tiempo que el hombre no va a ser menos hombre porque cocine, lo cual tienen razón, pero si vas en el auto con tu novia y se pincha la rueda seguramente ella no se va a querer bajar. Lo mismo cuando el hombre paga la primera cita. Se viven jactando que el hombre debe ser atento, romántico, etc. Cuando todos sabemos que es la mentira de la humanidad. Cuando encuentran un hombre así, simplemente no le dan bola. ¿Caballeros? No hay porque las damas tampoco existen, seamos sinceros, la mayoría quiere un Grey que les haga cosas cual machista sea su mente. Creo que el machismo hoy en día lo tienen las mujeres.”
Y así se iba armando el debate, era interesantísimo leer los diferentes tipos de pensamientos. Es la primera vez que hago uno sólo por tener curiosidad, asique todo esto era un nuevo mundo para mí.
Es verdad, no soy socióloga, ni psicóloga, sólo soy una estudiante de Comunicación Social, una ciudadana con muchas preguntas y pocas respuestas. Quizás con pocos aciertos y muchas confusiones. Pero que sin embargo, me interesan los temas que rodean a la sociedad en la que vivimos, una sociedad quizás carcomida por el mundo cosmopolita e imperial. En el que todos tenemos nuestros ideales, pro y contras.
Volviendo al tema del debate, después de los comentarios de los hombres, las mujeres empezaron a escribir también los suyos. Algunas molestas por ciertos comentarios, otras que creían todavía en ese cambio, en esa igualdad y que se podía llegar con mucho esfuerzo, y sin pensamientos machistas, manteniendo esa feminidad que nos caracteriza, poniendo como ejemplos mujeres que hicieron mucho por el país o por la comunidad, y que lo siguen haciendo.
“Creo que la mujer a lo largo de los años consiguió mucho más respeto del que tenía antes, si bien hoy en día la mayoría de los hombres no abren puertas ni regalan flores, las mujeres ganamos un montón de derechos y no necesitamos que nos abran las puertas, ahora podemos abrir las puertas juntos con igualdad. Creo que los tiempos cambian y el respeto pasa por otro lado, y en cierto punto cada vez se nos respeta más. Sin embargo, hay muchísimas cosas para mejorar, muchas luchas por ganar, para ganar la verdadera igualdad.
(…)La cosa pasa por la igualdad… no por un sexo débil y uno fuerte… y por suerte creo que de a poco nos vamos acercando cada vez más… pero como dije antes, falta… pero se puede llegar”
En sí, con tantas opiniones diferentes pude llegar a mi propia conclusión. En los principios de la historia, la mujer era vista como ese signo de maternidad, por ende, todo se situaba en el matriarcado, en el cual se adoraba su figura y ella iba al lado del hombre acompañándolo en las luchas, pero también este matriarcado tenía sus raíces por el hecho de que no existía un solo hombre que engendrara a una mujer,  sino que en una tribu la misma era madre de varios niños con diferentes padres.
El hombre al establecerse en un lugar definido con la agricultura, deja el matriarcado por detrás, porque nacen las familias, y se da inicio al patriarcado, era el hombre el que protegía las aldeas y salía a buscar comida, y la mujer quedaba en casa cuidando de los niños y recolectando frutos.
Y desde ahí en más, el hombre fue el que se ocupó de salir a trabajar, de llegar con el alimento para compartir en familia. Y la mujer quedo para las tareas de la casa, la limpieza la cocina y los niños. Pero los tiempos fueron cambiando, con las guerras mundiales, la mujer se vio obligada a salir en busca de trabajo porque ya no había quien trajera el pan al hogar. Cuando las guerras terminaron, y los hombres volvieron a sus hogares, las nuevas trabajadoras no quisieron abandonar ese lugar, y así fue. Entonces comenzaron los disturbios y sobre todo los denominados “machismo y feminismo”
Cuanto más nos acercamos a nuestros tiempos, me vienen a la cabeza muchos acontecimientos. Las guerras, la violencia, el maltrato. ¿Pero a caso esto no viene por ambos? Como hay hombres violentos, hay mujeres violentas, el maltrato está inserto en nuestra sociedad desde los comienzos. Cometemos nuestras equivocaciones como también nuestros aciertos.
Desde mi punto de vista, hoy en día las mujeres logramos estar en un lugar muy privilegiado en esta sociedad, así como los hombres también lo tienen. Es verdad, siempre van a existir diferencias, porque si pensaríamos todos de la misma manera, creo que no habría porqué luchar en este mundo, y sería un vivir rutinario.
Pero ¿saben que nunca va a cambiar? “EL AMOR”. Si, podemos estar en desacuerdo, pero mientras que exista un poco de amor en esa sociedad podrida ¿qué puede salir mal? No es bueno generalizar, hay mujeres, y hay hombres, pero no todos nacimos del mismo vientre. Yo no creo en eso de “todos los hombres son iguales” o “todas las mujeres buscan lo mismo” porque cada uno es diferente, en este mundo hay personas buenas, así como personas que no valen nada. Depende de con quién nos encontremos en nuestro camino y con qué ojos sepamos mirarlos.  
Hay muchas cosas que se perdieron, pero mientras tengamos amor y seamos felices vamos a poder salir adelante, tanto hombres como mujeres.
Voy a cerrar mi análisis con una frase de un comentario que me gusto mucho:
“La mujer nació de la costilla del hombre, no de los pies para ser superior, sino del costado para ser igual, debajo del brazo para ser protegida y poder proteger y junto al corazón para ser amada y poder corresponder a ese amor.

(…) La caballerosidad no se perdió, se dejo de enseñar y las feministas la desecharon como si fuera un insulto aunque nunca dejaron de añorarla”